Distinción a toda una vida dedicada a la educación

Nuestra madre espiritual y responsable de la C.C.D.A., Sra. María Augusta Pinharanda Gomes, ha sido honrada por la ciudad de Bovril como Ciudadana Ilustre por su labor educativa a lo largo de toda su vida: 
El 29 de noviembre de 1959 se recibió de maestra en el Colegio Cristo Redentor de Paraná.
1960: Fue docente en el Colegio Nacional, en el 1er año del 1er Magisterio de Bovril, sin sueldo, durante varios años, en las materias de física, anatomía, dibujo y francés.
1961: Suplencias en las escuelas N° 43 de Viraró y en la N° 10 de Carrasco. Fue maestra en la Escuela N° 32, en la que en ese año se fue construyendo un aula y baño, a inaugurarse el 19 de marzo de 1962.
1962: El 9 de marzo llega un nuevo director y queda cesante. El 3 de abril es nombrada en la Escuela N° 43. 
El marzo con Carmen Teresita Pereyra tuvieron la idea de abrir un Jardín de Infantes, que sería el primero de la zona. Anotaron 47 niños. Inauguraron el Jardín de Infantes "Santa Teresita" el 15 de abril, en un salón prestado en la calle Ramírez. La Directora fue Carmen Teresita Pereyra. María Augusta era la Vicedirectora.
El 9 de setiembre de 1964 fue el reconocimiento oficial de la Escuela N° 142.
En 1965 fue nombrada Directora de esa Escuela Particular Reconocida "Santa Teresita". 
El 13 de marzo de 1967 el colegio comienza a ser patrocinado por las Hermanas de la Santa Cruz. María Augusta continúa como Directora.
El 9 de noviembre de 1977 es nombrada Supervisora Docente de la Zona VII, creada en ese momento.
Como supervisora acompañó y facilitó la creación de 10 escuelas en la Zona VII.
En 1984 participó de la fundación del Instituto Privado San Pompilio María Pirrotti.
En 1987 fundó la Escuela "San José de Calasanz" de Capacitación Técnica.
Entre 1987 creó el Aula "Niño José" al servicio de todas las escuelas de Bovril para recuperación de niños que necesitaban apoyo y a contra turno de la escuela que iban. Funcionó hasta 1995, en que se cedieron los cargos a la Escuela Santa Dorotea.
En 1995 apoyó la fundación de la Escuela "Santa Dorotea".
Desde 1993 es Apoderada Legal de la Escuela San José de Calasanz y desde 1995 de la Santa Dorotea, hasta la fecha como titular.

En su discurso dijo: 
Bovril, 22 de marzo de 2011 – Salon de Cultura -

Transcurrir la vida, no es pasar por ella sin dejar indicios,

Transcurrir la vida, no es buscar mi huella sin mirar al otro,

Transcurrir la vida, no es arremeter, solo, para ganar espacio,

Transcurrir la vida, no es tomar atajos, para llegar primero,

Transcurrir la vida, no es abrir portones, sin conocer las puertas,

Transcurrir la vida, no es ubicar riquezas, para hacerlas mías,

Transcurrir la vida, no es buscar abrigo, sin construir cobijos,

Transcurrir la vida, no es borrar las huellas, para mostrar las mías,

Transcurrir la vida, no es vestir el sayo que quiero, sino el que debo;

Transcurrir la vida, no es dejar pasar el instante mágico y  preciso.

Transcurrir la vida, no es perder ese instante en el que nace el trigo.

Vivir la vida es pasar por ella, oyendo todos los bullicios,
Y aprender con ellos a construir mi huella, caminando con el otro,

Vivir la vida es ir delante construyendo espacios y poder legarlos,
A quienes caminan juntos y a los que vendrán, y seguirán construyendo,

Vivir la vida es saborear cada día el paso dado, pasar puertas antes que portones,
Es descubrir la riqueza de todos, para integrar la mía y crecer sin egoísmos,

Vivir la vida es construir columnas que sostengan sueños y no negarse al esfuerzo,
Es sacar mi riqueza para unirla a otros y crear espacios, marcar huellas, crear cobijo,
Es recuperar lo antiguo para unirlo al presente y así modelar el futuro,

Vivir la vida es poder reconocer lo que otros me legaron, ponerle lo mío y esculpir lo nuevo,
Es poder reconocer que el mundo estaba cuando yo llegué y nada nació conmigo,
Es poder decir con gozo que hallé semillas y las regué un poquito para que nazca el trigo.

Vivir la vida es saber encontrar las huellas que marcaron otros y a mí me condujeron,
Es poder, decir gracias a todos los que en la vida pusieron una hojita, para suavizar el camino,

Vivir la vida es poder vestir el traje que Dios hizo a mi medida, para que no lo deje a las polillas,
Es poder, decir gracias aún por lo que no fue bueno, aprendiendo que el fuego y las limas pulen los metales y las piedras y las hacen bellas.
Es poder decir con alegría, soñé con llegar a las cumbres para acariciar el sol,
sólo pude llegar al valle y allí encontré las flores, los animales y fundamentalmente al ser humano, y entender que nos necesitamos, que es necesario donar la vida, no transcurrirla árida y seca, cuidando mi pequeño huerto sin tener en cuenta que del mío y del de los otros, se alimentarán mis nietos y harán caminos nuevos, pero con cimientos, dados por todos.

Vivir la vida es pisar las piedras, bajar al llano, eludir las espinas, buscar la semilla, sembrarla en la tierra mejor que se pueda, pedir ayuda para regar la siembra y dejar la cosecha a Dios, para que la reparta a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me alegro muchísimo por esta justísima distinción.
Las frases del discurso han sido dichas antes con su propia vida, no son huecas están llenas de su vida.
Me uno con mi corazón al agradecimiento de quienes como yo han recibido tanto de ella.
Dios la siga bendiciendo con su Amor.